Croquis actualizados de uno de los mejores sectores costeros de Cantabria.
Es un sector donde predomina el séptimo grado con una roca caliza bastante adherente y pinchuda a veces. Vías verticales y desplomadas de unos 22-28 metros de longitud. Todas las vías son buenas y ofrecen un aliciente distinto en su escalada, si bien la presencia de repisas en muchas de ellas le resta continuidad.
Orientación este y muy protegido de los vientos por lo que es un sector muy adecuado para escalar prácticamente todo el año (sobre todo por las mañanas en invierno y por las tardes en verano).
Para acceder aparcamos en el monumento al pescador y saltamos la barandilla en dirección al mar, veremos un camino que baja, enseguida nos desviaremos a la derecha para seguir bajando con cuidado y la ayuda de algún pasamanos de cuerda. En 5 minutos de bajada estaremos a pie de pared.
El pie de vía es estrecho y no hay que despistarse, conviene atarse al pasamanos. También es recomendable el uso de casco. Importante!: algunos de los mosquetones de los descuelgues no se abren (se ha depositado salitre y ha “sellado” los gatillos) por lo que hay que maniobrar en consecuencia.
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